El Parque Nacional de los Lagos de Plitvice, ubicado en el centro de Croacia y cerca de la frontera con Bosnia, es un paraíso natural que celebra una combinación casi imposible de tonos de verdes, azules, esmeralda y turquesa, entre lagos, cascadas y bosques que se recorren por caminitos y puentes. Se trata de un paisaje único e imperdible durante un viaje a Croacia: además de ser Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, es un lugar lleno de paz y buena energía, y una postal natural que no se olvida jamás.
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